Avanza el Paisaje de Conservación Islas y Cordones del Maipo: Agrupaciones familiares de agricultores en Isla de Maipo obtienen certificación orgánica SAG

19/05/2020

Luego de un trabajo de tres años de la Agrupación de Productores Agroecológicos de Isla de Maipo (APADIM), que incluyó intercambios de experiencias, capacitación y esfuerzo conjunto con organizaciones como el Programa de Desarrollo Local de Isla de Maipo (PRODESAL), para el desarrollo de producción limpia de sus productos, la agrupación consiguió ingresar al Sistema de Certificación de Productos Orgánicos Agrícolas con la figura de Organización de Agricultores Ecológicos (OAE), otorgado por el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG).

Patricio Muga cultiva hortalizas, principalmente lechugas. Aprendió de su papá, quien también era agricultor, pero tenía una forma distinta de manejar sus productos: A través de la agricultura limpia. “Yo muchos años iba al centro de la Isla, vendía en mi camioneta, y les hablaba de la producción limpia, y la gente muchas veces piensa que todas las lechugas son iguales, pero una que tiene químicos es muy distinta a una hecha en producción limpia”, explica Muga, quien se encontró con otras familias de agricultores que también hacían o buscaban realizar el mismo trabajo con mejores prácticas agrícolas. Fue así como se empezaron a reunir, y más tarde formalizaron el grupo como marca registrada en el INAPI a nombre de APADIM, que hoy es la primera agrupación de certificación de agricultura familiar campesina a nivel provincial y la segunda en la Región Metropolitana, en donde Patricio Muga es presidente.

Mermeladas, plantas medicinales, miel, paltas y hortalizas son algunos de los distintos productos que venden en total 16 familias que forman parte de esta agrupación de desarrollo agroecológico, cuyo lema es vender productos limpios, sanos, y libres de plaguicidas. “Esto nace de la motivación de las personas que, como factor común, pertenecen a familias rurales acogidas dentro del programa PRODESAL”, asegura Sebastián Vega, jefe técnico de PRODESAL de Isla de Maipo, quien añade que “ellos, por convicción propia, deciden no manipular agroquímicos porque tienen experiencia de que puede producir un daño si no se maneja bien”. Por lo mismo, la agrupación perfeccionó sus técnicas de manejo de cultivo de forma amigable con el medio ambiente, generando así también un cuidado para la salud de los clientes.

El trabajo junto a PRODESAL y la Municipalidad de Isla de Maipo, motivó a esta agrupación para generar un vínculo con el SAG, lo que les permitió ingresar al Sistema de Certificación de Productos Orgánicos Agrícolas, con la figura de Organización de Agricultores Ecológicos (OAE). “Amerita destacar el trabajo de los funcionarios de la Oficina Sectorial de Talagante, que en conjunto con los profesionales del Programa PRODESAL, entregaron apoyo y orientación en todo el proceso de formalización de la figura OAE”, declaró André Bañados, Profesional del Área de Recursos Naturales Renovables de SAG Región Metropolitana.

“El logro radica en que formalmente ya son una OAE, lo cual les va a permitir auto certificarse después de un periodo de permanencia en el sistema. Lo destacable de poder certificar sus productos como orgánicos, es que pueden garantizar al consumidor que el producto que compran y consumen tienen el sello orgánico, pues cumple con la normativa de la Ley 20.089, que es la que regula los productos que ingresan al mercado con el sello de orgánico. Los productos de esta OAE podrán venderse tanto en el mercado nacional como el de Brasil, con quienes tenemos un acuerdo para ello”, aseguró Marcelo Giagnoni, Director Regional de SAG Región Metropolitana.

Dicha certificación, explica Patricio Muga, es un gran logro para los pequeños agricultores de Isla de Maipo, ya que éstas, en algunos casos, pueden adquirirse de manera más fácil para las empresas, que tienden a exportar. Los próximos pasos a seguir para los miembros de la agrupación son seguir perfeccionando sus técnicas y lograr la certificación bajo los estándares validados por SAG y APADIM, que les permita cubrir una amplia gama de producción orgánica, y así poder vender en la capital sus productos con un sello que garantice al consumidor lo que está comprando. “Es muy gratificante tener aquí en Isla de Maipo una agrupación que va a trabajar con un logo y en diferentes tipos de rubro. Eso nos va a dar un plus muy importante, para la comuna, para que conozcan quiénes somos y cómo lo hacemos”, dice el presidente de APADIM, quien también destaca que hoy la gente toma más conciencia de lo que come, de dónde viene, y qué químicos usan, ya que algunos sobrepasan el porcentaje permitido por normativa.

Un aporte a la biodiversidad

Adecuar las prácticas productivas a un sistema más limpio y sustentable, no solo mejora la calidad del producto para su consumo, sino que también genera acciones responsables con el medioambiente, al disminuir el uso de agroquímicos. El camino de la producción orgánica libre de pesticidas que han adoptado los agricultores de Isla Maipo, es también, un aporte significativo a la creación y consolidación del modelo de gobernanza territorial “Paisaje de Conservación Islas y Cordones del Maipo”, que lleva adelante el municipio con la colaboración con el Proyecto GEF Montaña. “El año 2017 el municipio vivió la experiencia en el sur del país de conocer cómo municipios de la Región de Los Ríos habían avanzado en instalar un paisaje de conservación, el que involucra a todos los actores que comparten un mismo territorio. Volvieron muy motivados y hoy estamos felices de ser parte en la construcción de la visión agroecológica para Isla de Maipo, apoyando con acompañamiento técnico, intercambio de experiencias y capacitación”, comenta Marianne Katunarić, coordinadora nacional del Proyecto GEF Montaña.

“Siendo una comuna fundamentalmente rural y con una identidad agrícola muy fuerte, esta certificación significa que estos agricultores, y los que se unan con el tiempo, van a ir sumando un beneficio al territorio y al manejo que hay en las prácticas productivas, que cuando no están bien hechas, son tremendamente destructivas e impactan negativamente al medio ambiente”, explica Rosa Fernández, directora de Desarrollo Económico Local de Isla de Maipo. Para Fernández, esta relación de cuidado en la producción es un círculo virtuoso, que influye positivamente en otros pequeños, medianos y grandes empresarios de la comuna, quienes están convencidos de adherir y contribuir a la creación de una comuna agroecológica que conserva el paisaje, su patrimonio cultural y biodiversidad, ofertando oportunidades de desarrollo, salud y esparcimiento a la población. Así, se está desarrollando una conciencia de sostenibilidad en las distintas áreas productivas de la comuna, y esto tiene un efecto de bola de nieve, al estimular también en la población y autoridades a continuar adelante con la protección de la biodiversidad en el paisaje productivo, de los servicios ecosistémicos que brindan los cordones montañosos de Cantillana y el borde río del río Maipo. “Nuestro gran sello como comuna es ser un destino verde, vinculando nuestra oferta turistica con una agricultura, vitivinicultura sustentable, respetuosos con los valores de nuestro territorio y cultura. Hacia allá queremos avanzar de manera responsable con nuestros productores y los vecinos de Isla de Maipo”, añade Fernández.

“La finalidad es proteger y educar en el tema del cuidado de la biodiversidad, porque nos dimos cuenta que en el territorio de nuestra comuna hay especies endémicas únicas en el mundo”, dice Marisol González, jefa de la Unidad Ambiental de la Municipalidad de Isla de Maipo, quien destaca las distintas aristas que se han desarrollado en la comuna además del trabajo con los agricultores. “No solamente tenemos la certificación orgánica, sino que hoy día esa asociación que está vigente con decreto, tiene que seguir trabajando en otros temas. Vamos a seguir educando sobre el cuidado del agua, y de las especies nativas. Partimos con un grupo pequeño, pero se han ido sumando pequeños emprendedores, pequeños empresarios. Este año trabajamos con todos los campings de la comuna para incorporar acciones concretas que aportan a la protección de nuestra biodiversidad, trabajamos con educación, con forestación nativa, con un programa de anidación de aves rapaces, tenemos mucho trabajo por hacer”, asegura González.

“Fuimos los primeros en dar este paso, y esperamos que también otras personas se vayan incorporando, para que vean que sí pudimos, ellos también pueden hacer cosas creativas”, asegura Patricio Muga, quien espera que Isla de Maipo pueda convertirse en un ejemplo a seguir para otras comunas que trabajan con desarrollo sustentable.