Estudio revela que carnívoros nativos se refugian en la Cordillera de la Costa y su principal amenaza son los perros

21/09/2022

El Proyecto GEF Montaña, en el marco del levantamiento de información para el Sistema de Información y Monitoreo de Biodiversidad y Servicios Ecosistémicos de la Región Metropolitana de Santiago (SIMBIO RMS), caracterizó el ensamble de carnívoros nativos terrestres presentes en los cordones montañosos predominantemente naturales del área del proyecto. Del análisis de registros fotográficos de las cámaras trampa, que abarcó el período entre marzo del 2018 y abril de 2022, se puede inferir que son los carnívoros nativos de menor tamaño los que se ven más representados en la Cordillera de la Costa, sugiriendo que esta podría estar actuando como refugio en esta región altamente antropizada.

 

Se dispusieron cámaras trampa en una superficie de 400.000 hectáreas, definidas por el proyecto, en espacios naturales y seminaturales, así como en áreas donde se realizan actividades productivas y sitios públicos. Esto permitió comparar el uso que los carnívoros nativos le dan a estos distintos elementos del paisaje mediterráneo de Chile central intensamente intervenido por el ser humano. El monitoreo realizado es un retrato, la captura de un instante ecológico en diversas localidades de montaña de la RMS a través de un registro fotográfico, que en este caso permitió conocer la presencia de las ocho especies de carnívoros nativos que aún habitan los paisajes de la RMS y sector Costa de Valparaíso.

Los resultados permitieron caracterizar la presencia de las amenazas para estos carnívoros, entre ellas principalmente las especies exóticas como perros y gatos. Otro aporte importante de este monitoreo ha sido la identificación de diversos factores asociados a la gestión predial local y gestión de conservación en iniciativas privadas y cómo influyen en la riqueza y tasa de detección de carnívoros nativos.

Monitoreo de carnívoros del SIMBIO RMS

El monitoreo de carnívoros abarca el área del Proyecto GEF Montaña, es decir, los cordones montañosos de la zona central de Chile, puntualmente en 5 comunas de la Región de Valparaíso sector Cordillera de La Costa (Cartagena, Casablanca, Olmué, Quilpué y Santo Domingo), y 15 comunas de la Región Metropolitana sector rural y periurbano de la ciudad de Santiago (Alhué, Buin, Curacaví, Colina, Isla de Maipo, La Reina, Lampa, Lo Barnechea, María Pinto, Melipilla, Paine, Peñaflor, Pirque, San José de Maipo y Til-Til). Un total de 80 cámaras se rotaron en 132 puntos de fototrampeo en un rango altitudinal que oscila entre los 75 m.s.n.m. hasta los 2.900 m.s.n.m.

Estos datos son de suma importancia dado el frágil estado de conservación de casi todas estas especies, especialmente el Gato Andino, calificada en peligro de extinción. Los resultados del fototrampeo permitieron detectar las 8 especies de carnívoros nativos descritos para el área de estudio: puma (Puma concolor) NT (Casi Amenzada), güiña (Leopardus guigna) VU (Vulnerable), gato colocolo (Leopardus colocolo) NT (Casi Amenazada), gato andino (Leopardus jacobita) EN (En Peligro), zorro culpeo (Lycalopex culpaeus) VU (Vulnerable), zorro chilla (Lycalopex griseus) LC (Preocupación Menor), quique (Galictis cuja) LC (Preocupación Menor) y chingüe (Conepatus chinga) LC (Preocupación Menor). Así también se detectó la presencia de perros y gatos, en un total de 132 puntos de fototrampeo, 58 ubicados en 38 localidades mostraban presencia de perros (44%) y 12 ubicados en 11 localidades con presencia de gatos (9%).

Detección de impactos de animales exóticos sobre carnívoros nativos

A nivel mundial, ya se conoce el impacto negativo de los perros domésticos sobre los carnívoros nativos. Los perros pueden interactuar con la comunidad, compitiendo por alimento y espacio, depredando, desplazando, hibridando e incluso actuando como un reservorio para algunas de las enfermedades infecciosas más devastadoras. En el caso de la RMS, las especies exóticas invasoras, particularmente perros y gatos, representan una seria amenaza para la fauna nativa, y en todo el país, pudiendo afectar de modo irreversible a las poblaciones de carnívoros nativos, incluso provocando extinciones locales.

Así lo demuestran los resultados del monitoreo de carnívoros nativos del SIMBIO RMS: el perro se encuentra ampliamente distribuido, cohabitando espacial y temporalmente con los carnívoros nativos e interactuando de manera potencialmente peligrosa con ellos. Las interacciones registradas, principalmente con zorro culpeo, ocurren en zonas con mayor densidad de perros, en cercanía a sitios perturbados por el humano y dentro de áreas protegidas. Camila Dünner, médico veterinario, quien colaboró con el monitoreo mediante su tesis doctoral, destaca que “el tiempo que transcurre entre las interacciones entre las especies de perros y gatos con animales nativos permite la sobrevivencia de patógenos en el ambiente y su eventual transmisión a carnívoros nativos. Así, de modo alarmante, los registros de nuestro fototrampeo contienen evidencias de zorros con patologías dermatológicas y, además, estando en terreno, se identificó́ un individuo de zorro con signología compatible con distemper. También creemos que los zorros han adoptado conductas de evitamiento con los perros, ya que sus patrones horarios difieren en zonas con y sin perros; esta alteración conductual podría afectar sus horarios de caza y descanso impactando su adecuación biológica o “fitness”. Finalmente, es importante destacar que al menos un 12% de los perros registrados tenían collar y no se encontraban acompañados por un humano, demostrando la falta de tenencia responsable”.

Estos nuevos datos debieran replantear las estrategias políticas de tenencia responsable y control poblacional canino y felino a nivel nacional, los datos muestran que se requiere una solución urgente, a corto plazo. Es sabido, por ejemplo, que la fiscalización y penalización de la tenencia irresponsable no es un método efectivo por sí solo, se requiere educar y comunicar la necesidad de un cambio de comportamiento de la población con su entorno natural y la biodiversidad.

 

Paradojas de la conservación

El fototrampeo fue compuesto por 132 puntos con cámaras ubicadas en 46 localidades o predios rurales que poseen distintos niveles de perturbación antrópica, y dedicados a una diversidad de actividades como la conservación, el turismo, la agricultura y ganadería, y espacios públicos.

Esta diversidad de lugares permitió identificar un grado de correlación entre la figura de administración de cada predio; un sitio privado con actividades productivas; una iniciativa privada de conservación; o un sitio público carente de todo tipo de administración, y la variación en la tasa de detección y riqueza de carnívoros nativos. Esto permitió obtener información relevante para comprender el impacto que las acciones concretas de manejo y administración de los sitios tienen sobre el ensamble de carnívoros nativos de la RMS.

Los resultados obtenidos con las cámaras trampa detectaron mayor cantidad de carnívoros nativos en cercanía a cursos de agua, en zonas con mayor disponibilidad de presas, y en predios que contaban con acceso delimitado por cercos perimetrales, que limitan el acceso humano y desarrollo de actividades ilícitas, pero no impiden el paso de los animales. Del mismo modo, en sitios protegidos que realizan actividades de turismo y concentran mayor densidad de personas con horarios de cierre más tardíos afectaron negativamente la detección de carnívoros.

Los predios de administración privada, con parches de vegetación nativa, dedicados a la ganadería y/o agricultura, fueron lugares que alcanzaron las mayores tasas de registro de carnívoros nativos. Esto podría deberse a que los administradores de estos predios orientan el uso de parte de sus ingresos a la protección de sus actividades productivas -cierre perimetral, bajo acceso de visitantes, vigilancia del predio y control de perros de libre deambular-, medidas que también favorecen la presencia de carnívoros nativos. Asimismo, destacó una mayor riqueza en predios tanto protegidos como no protegidos que realizaban control de caninos.

Respecto del número de especies registradas en un sitio (la riqueza), los datos indican que es mayor en asociación con la cobertura vegetal, en zonas con menores temperaturas promedio y en predios de mayor tamaño que cuentan con iniciativas de protección, que además aplican medidas frecuentes (de manera semanal) de manejo para mantenimiento y restauración.

Los predios con iniciativas de conservación presentaron la mayor riqueza de carnívoros, lo cual es coherente con la ubicación de estas áreas que buscan preservar los relictos de bosques y matorrales esclerófilos, así como la vegetación andina que mantienen cierto grado de naturalidad. Aun cuando, la mayoría de las áreas protegidas no contaban con los recursos necesarios para invertir en acciones de conservación efectivas, como por ejemplo planificación a largo plazo, regulación de actividades deportivas y turísticas, mantención de un cerco perimetral o un programa de control de carnívoros exóticos (perros y gatos).

Por último, se hace urgente brindar más atención a las potenciales amenazas que están sufriendo los carnívoros, tanto dentro como fuera de áreas silvestres protegidas en matrices metropolitanas, que pueden incluso estar camufladas dentro del propio sistema de gestión de los predios rurales.

 

Recomendaciones:

1.   Fortalecer los mecanismos de financiamiento y gestión de las áreas protegidas existentes.
2.  Los administradores de predios en la zona central de Chile, tanto protegidos como no protegidos, deben evaluar las estrategias más efectivas para limitar el acceso autorizado y no autorizado de personas, como la delimitación perimetral y el establecimiento de capacidades de carga de cada localidad.
3.  La zonificación espacial y temporal puede unificarse con los aspectos anteriores y hacer más eficiente la aplicación de la medida de control de acceso.
4.  Establecer indicadores de interés para la conservación, que permitan definir y aplicar de manera adaptativa actividades de manejo efectivas, para determinar de qué manera las distintas especies de la comunidad de carnívoros responden a los tipos e intensidades de perturbación antrópica.

Por otra parte, se hace un llamado a fortalecer prácticas de manejo de especies exóticas en áreas naturales de la infraestructura ecológica, ya sean de administración privada o pública, para promover la conectividad de los parches remanentes de corredores naturales y con ellos permitir el flujo de especies tope, como los carnívoros nativos, que con su presencia son indicadores de una “buena salud” del corredor.

 

Nota: Esta información ha sido levantada gracias a la colaboración de una tesis de doctorado* de Medicina de la Conservación de la Universidad Andrés Bello, junto con una encuesta** a particulares dueños de los predios monitoreados encargada por el Proyecto GEF Montaña, que forman parte de las acciones de pilotaje de instalación del sistema de monitoreo de carnívoros del SIMBIO RMS. Los datos colectados pueden ser descargados desde la plataforma GBIF del MMA.

*Alumna tesista Ph.D.: M.V. Dipl. Camila Dünner.

** Consultora a cargo encuesta: Roxana Casas, socióloga.

 

GALERÍA DE FOTOS

*Primera fila de izquierda a derecha, las dos primeras fotos indican patologías dermatológicas; la tercera foto probable ataque de otro animal, tal vez perro.

**Segunda fila de izquierda a derecha, primera y segunda foto se compara un mismo lugar en las que se registraron perros y zorro, como también en la tercera foto de la misma fila y primera foto de la tercera fila (zorro con cría), ahí los zorros se volvieron más nocturnos con comportamiento aparentemente de evitación. En áreas donde no se registraron perros, los zorros estuvieron activos tanto durante el día como en la noche.

Conoce más sobre los «Resultados y lecciones aprendidas de un diseño público-privado de monitoreo de carnívoros nativos para fortalecer la gestión de su conservación» en el marco del SIMBIO RMS del Proyecto GEF Montaña.