Chile en la red mundial GLORIA: Por primera vez las cimas de monitoreo serán administradas por un organismo público

17/02/2020

Tras dos años de trabajo, nuestro país se unirá a la red internacional que estudia el comportamiento de la vegetación de altas cumbres ante el cambio climático. El sitio de monitoreo fue instalado en la Reserva Nacional Río Clarillo, y será administrado a través del Ministerio del Medio Ambiente en colaboración de CONAF. “Es interesante que (en Chile) pueda existir un vínculo más directo con el uso de la información que se genere y la formulación de políticas públicas”, señaló Francisco Cuesta, coordinador regional de la red GLORIA-Andes.

El Proyecto GEF Montaña ha trabajado arduamente para incorporar a Chile en la Global Observation Research Initiative in Alpine Environments (GLORIA), red de monitoreo mundial que busca investigar cómo la vegetación de alta montaña está siendo afectada por el cambio climático, a través de observaciones en las cumbres de los cordones montañosos. Desde finales de 2008 se ha desarrollado la versión GLORIA-Andes, con cimas de monitoreo instaladas a lo largo de la cordillera de Los Andes, desde el norte de Argentina hasta Venezuela, pasando por Bolivia, Perú, Ecuador, Colombia, y muy pronto será formalizado para Chile.

Cimas en Río Clarillo

Francisco Cuesta, ecólogo y coordinador científico de la red GLORIA-Andes, se reunió en nuestro país con el equipo del Proyecto GEF Montaña para conocer el avance del trabajo y los detalles de las primeras cimas de monitoreo instalas en cumbres de la Reserva Nacional Río Clarillo. “Chile aportará representatividad biogeográfica, ya que al sumarse a esta red tendremos mayor cantidad de sitios para analizar con mayor profundidad y así contar con estadísticas y patrones sobre la dinámica de las comunidades de plantas en estas zonas de alta montaña presentes en Los Andes”, señaló el investigador.

Hasta ahora, GLORIA-Andes registra cimas más cercanas hacia el trópico, ya que incluso las estaciones en Argentina se encuentran ubicadas hacia el norte. “Estamos muy orgullosos, ya que los datos que va a entregar Chile serán los primeros en observar a largo plazo el efecto del calentamiento global sobre ecosistemas de clima Mediterráneo templado, permitiendo que todos los sistemas del mundo estén representados en GLORIA”, indica Juan José Donoso, jefe de la División de Recursos Naturales y Biodiversidad del Ministerio de Medio Ambiente y director del Proyecto GEF Montaña.

La cima de monitoreo de GLORIA en Chile será administrada por el Ministerio del Medio Ambiente en colaboración con la Corporación Nacional Forestal – CONAF, siendo la primera vez que un servicio público asume esta responsabilidad, y cuyos datos serán entregados en forma pública. “Es interesante que pueda existir un vínculo más directo con el uso de la información que se genere y la formulación de políticas públicas”, dijo Francisco Cuesta. Sumado a ello, el trabajo contará con una fuerte colaboración de científicos y académicos del Instituto de Ecología y Biodiversidad – IEB y el herbario de la Universidad de Chile. “Es importante siempre tener a la academia involucrada, ya que al ser un estudio de largo plazo se requiere de un trabajo sistemático de
décadas, de manera que tenga sentido”, agregó el experto.

Por su parte, desde CONAF destacan la importancia de este monitoreo y lo que significa a nivel nacional. “Esta es una respuesta clara y concreta de lo que está haciendo Chile frente al cambio climático. No es un trabajo solo de una institución o de los científicos involucrados, sino que representa un compromiso a nivel país”, asegura Carlos Peña, administrador y guardaparque de la Reserva Nacional Río Clarillo. “Se destaca el trabajo del equipo GEF Montaña, es un proyecto que en lo personal y en lo técnico, enorgullece a esta Unidad y, en particular, a su personal que podamos ser parte esencial de esta iniciativa”, agrega Peña.

Petra Wallem, encargada del Sistema de Información y Monitoreo de Biodiversidad (SIMBIO) del Proyecto GEF Montaña, quien ha liderado la instalación de este primer sitio GLORIA en Chile, ha realizado un arduo trabajo para lograr este objetivo. “Llevamos dos años recorriendo varios sectores de Los Andes de la Región Metropolitana, buscando las cimas idóneas para este estudio. Finalmente, logramos dar con ellas en la Reserva Natural de Río Clarillo, y ahora estamos en proceso de instalar los termómetros que registrarán la temperatura en forma continua cada una hora, y realizar el levantamiento florístico. Esta última etapa de instalación requiere de al menos tres campañas de terreno de una a dos semanas, en lugares de poco acceso y baja conectividad, rodeados de los hermosos paisajes que nos brinda la cordillera de Los Andes.”

Resultados preliminares

Los datos obtenidos a partir de la línea base de GLORIA-Andes, muestran valores muy altos de diversidad Beta, es decir, en palabras de Francisco Cuesta, “existe un alto recambio en la composición de las comunidades de las cumbres, a lo largo del gradiente latitudinal”. Según lo observado, los factores ambientales que explican este patrón son las precipitaciones, las diferencias en las temperaturas mínimas y máximas anuales, y el tipo de sustrato local de cada cima.

Entre otras observaciones, los monitoreos también han evaluado el grado de vulnerabilidad de las comunidades vegetacionales en la ecorregión de páramo en comparación a las de puna, a través del análisis de caracteres del nicho térmico, según explica el investigador: “Se ha encontrado que las especies y comunidades más cercanas al Ecuador tienden a tener mayor susceptibilidad a perder idoneidad climática en escenarios de cambio climático. De igual forma, las comunidades ubicadas en zonas de mayor altura tienden a tener mayor susceptibilidad de impactos proyectados que las de zonas de latitudes más altas y ubicadas a alturas más bajas”. Lo anterior, sugiere que una gran cantidad de especies endémicas de la puna y el páramo tienen una alta susceptibilidad ante el incremento de temperatura.

“Esta vulnerabilidad al cambio climático es lo que se está estudiando a través de las cimas de monitoreo de GLORIA, en un contexto en que las presiones climáticas aumentan, la temperatura cada vez es más extrema, tanto en invierno como en verano. Por lo que esperamos que los datos entregados por nuestro país sean de gran utilidad para la ciencia internacional y para la toma de decisiones a nivel nacional”, concluyó Juan José Donoso.